El consistorio ya ha puesto en marcha los trámites con el consorcio de compensación de seguros y está realizando un informe de evaluación de daños para solicitar la declaración de zona catastrófica.

El ayuntamiento de Santillana del Mar que dirige el alcalde, Isidoro Rábago León, está intensificando todas las gestiones necesarias para intentar subsanar en el menor tiempo posible, todas las incidencias que dejó la inundación del pasado sábado día 21 de julio en distintos puntos del municipio tanto a bienes públicos como privados.

Según ha confirmado el alcalde, Isidoro Rábago “el consistorio tiene abiertos dos frentes principales, uno con el consorcio de compensación de seguros para evaluar los daños y su posible resarcimiento en los vehículos privados afectados en la inundación del aparcamiento de Rolaceña,  y un segundo frente con la Federación de Municipios de Cantabria y con la Delegación de Gobierno en la región para la evaluación de solicitud de zona catastrófica”.

Rábago ha confirmado que “desde el mismo día de la inundación nos pusimos en contacto con el consorcio de compensación de seguros  para que todos los afectados por desperfectos en sus vehículos conocieran los pasos a realizar, hemos procedido a informar a todos los ellos para que evalúen los daños en sus respectivos vehículos y que los peritos valoren los mismos en función de los dictámenes de los respectivos talleres, para valorar la compensación a que tendrán derecho los afectados”.

El alcalde también ha adelantado que “los servicios municipales están realizando desde el día siguiente a la inundación un exhaustivo informe de evaluación de daños, tanto en los bienes de titularidad municipal como en los de titularidad privada para conocer y valorar cuantitativamente el alcance de la catástrofe vivida el pasado sábado”.

Fuentes municipales han confirmado que una vez que se conozcan las conclusiones del informe de evaluación de daños se procederá a la celebración de un pleno extraordinario, en el que además se contemplará otro informe solicitado a la Federación de Municipios de Cantabria y que tendrá como único punto en el orden del día la solicitud a la delegación de gobierno de la declaración de zona catastrófica.

Desde el equipo de gobierno no se han querido poner plazos ya que según el alcalde “las incidencias no sólo han tenido lugar en el aparcamiento de Rolaceña, son también en diversos puntos del casco histórico de Santillana y en otros puntos del municipio como en las localidades de Ubiarco o Queveda, afectando a bienes de titularidad pública como a empresas y negocios privados, por lo que lo prioritario es evaluar todos los daños para que el pleno, con todos los datos, pueda proceder a la solicitud de declaración de zona catastrófica”

Rábago ha querido resaltar que “es necesario subsanar todos los desperfectos en el menor tiempo posible, pero al mismo tiempo no debemos dejarnos llevar por las prisas ya que Santillana está declarada como monumento histórico-artístico y ello requiere una evaluación especial y diferente por las particularidades tan específicas de nuestra villa”.

Por último el alcalde ha afirmado que “todas las alcantarillas y sumideros estaban absolutamente limpios y saneados, pero la tromba de agua fue impresionante y además coincidió con la pleamar, algo que fue el detonante principal para que se produjera una tragedia que, por suerte, solo ha dejado daños materiales que intentaremos subsanar con todas las gestiones que estamos realizando”.